Nuestro Staff

La hostería Santa Elena fue adquirida, en 1962, por Alberto Dómine, un marplatense que tuvo que instalarse en Mendoza por recomendaciones médicas. Sufría de asma y los profesionales de la salud le habían sugerido que se radicara en la provincia de Mendoza. Comenzó a trabajar de mozo en el hotel Las Chacritas, donde conoció al amor de su vida: Ana María Quiroga. Luego de unos años de casados, compraron la hostería que pasó a llamarse hospedaje Don Alberto. Él hacía las mejores parrilladas de la zona, según los lugareños. Mientras que los canelones caseros de doña Ana eran la debilidad de varios personajes de renombre por la década del ‘70, Nicolino Locche, campeón mundial de boxeo y amigo de Alberto Dómine, iba todos los domingos a disfrutar de esas pastas caseras, al igual que su entrenador Francisco Paco Bermúdez y su representante Tito Lectoure, quien también era dueño del estadio Luna Park de Buenos Aires. En aquel entonces, el hospedaje contaba con ocho habitaciones. Hoy en día la construcción se mantiene casi original con una encantadora rusticidad típica de las primeras edificaciones de la zona: las paredes son de piedras, muy gruesas y resistentes. En su época de esplendor, el lugar albergó a artistas como Leo Dan, Leonardo Favio, Lolita Torres, Ricardo Bauleo y la española Carmen Sevilla. También fue el lugar elegido para que concentrara el equipo de Independiente Rivadavia (Club deportivo de fútbol mendocino). En el año 2000, doña Ana fallece y dos años después muere don Alberto. Según sus hijos, no pudo resistir vivir sin el amor de su vida y desde el día que ella murió no dejó de decir ni una sola vez cuánto la extrañaba.